Nuestra Historia

Todo comenzó con Yoru, un gatito negro de ojos brillantes que llegó a nuestras vidas y se robó nuestros corazones desde el primer momento. Yoru nació con anemia, una condición que requería cuidados especiales y mucho amor, algo que Kerlin y yo, Olivier, le dábamos sin pensarlo dos veces.

Un día, Yoru desapareció. La angustia que sentimos es difícil de describir. No sabíamos si se había perdido, si alguien se lo había llevado, o si su frágil salud le había jugado una mala pasada. Pasamos semanas buscándolo: recorriendo calles, pegando carteles, preguntando a vecinos... pero Yoru nunca volvió a casa.

El tiempo pasó, y aunque el dolor por Yoru nunca desapareció del todo, la vida nos trajo nuevas alegrías. Adoptamos a Liory, una hermosa gatita consentida que llenó nuestro hogar de ronroneos y travesuras. Pero nuestra familia ya tenía un miembro muy especial: Max, mi fiel compañero desde hace más de 9 años, un peludito callejero que me enseñó lo que significa la lealtad incondicional. Y hace unos meses, llegó Nala, una adorable Beagle que adoptamos y que completó nuestra manada con su energía y dulzura.

Fue entonces, mientras navegábamos por internet buscando información sobre identificación de mascotas, que una idea comenzó a tomar forma en nuestros corazones: ¿Y si pudiéramos evitar que otras familias pasaran por lo mismo que nosotros?

Así nació Peluditicos: de una historia de amor y pérdida, pero sobre todo, de la esperanza de que ninguna mascota tenga que estar lejos de su familia. Creamos esta plataforma pensando en todas esas noches de incertidumbre, en todos esos "¿y si...?" que nunca pudimos responder con Yoru.

Cada tag QR que creamos, cada perfil de mascota que se registra, cada escaneo que notifica a un dueño preocupado... es un pequeño tributo a Yoru y a todos los peluditos que merecen volver a casa con quienes los aman.